6.10.11

Poetas sin rostro



Un texto en comunión. La unión de dos fuegos

que se sienten fuera de lugar, poco comprendidos,
obligados a falsear sus realidades para soportar y seguir...
Y un humilde homenaje a esos escritores que saben
escucharnos y decirnos mejor que nosotros mismos.



Esos "poetas sin rostro" como los llamas, son yo misma tendida en un bosque de amapolas sonriendo con las manos abiertas, con los ojos abiertos, con la mente abierta... levitando sobre la brisa del capullo que encierran sus palabras. Cómoda en sus frases, me mezo y me distiendo, las horas pasan y flotan suaves contemplando su inteligencia y su prosa, su poesía... No son simplemente rostros los que veo, son líneas que vivo, son manos manchadas de tinta indeleble al tiempo, son ojos que rozan y acarician papeles destinados a lo eterno, son mundos confinados en una habitación, ocultos, mundos que una vez descubiertos expulsan lo mejor de si y mueren en su propia luz de verdades ajenas al fluir de lo común, poco atractivas a lo común; la verdad de los hilos, los peligrosos hilos... Son burgueses talentosos y desinteresados, son muertos que gritan, y sus gritos destrozan con estética la "estética" de un mundo que con placer destruiría de tener el poder, de gozar de su talento en mí; su fuerza más mi fuerza y juntos romper los vidrios de lo tangible, el gris de lo simplemente tangible... tu gris y tangible universo de "cosas". Son un intento de refugio, lejanía, lo más lejos posible a la costumbre de tu transcurrir acumulando, el camino recto del transcurrir de la mayoría, la comodidad del no mirar hacia atrás, la comodidad del no contemplar, solo sumar en miradas vagas, fugases y apáticas... ¡ELLOS DIJERON LO QUE YO NO PUEDO! ¡ELLOS ENCONTRARON MIS PLEGARIAS! ...y ahora flotan en mis ausencias. Son también tus rostros... el espejo de tu nada, tu ignorancia ante éste jardín que soy YO. Pero... No es tu culpa. No. Es mía, es mi estar en medio, mi no saber expresarlo en tu idioma, ni usar bien el suyo para ser del todo su par, mi estar partida al medio, entre dos tierras... No... saber... decir... No saber qué más decir.

Ellos... No encuentro a nadie como ellos, quisiera estar con ellos, ser como ellos, vivir en ellos, expresar lo que ellos; escupir vida y muerte a su misma altura, jamás morir, como ellos supieron... jamás morir.


Eso me enseñaron mis "poetas sin rostro".




-por 3libras + sole-





"Aprender a dormir en la memoria de un muro,
en la respiración de un animal que sueña...
y seguir transitando este jardín de senderos que se bifurcan."